El Gobierno busca imponer un esquema de incrementos salariales mediante sumas fijas hasta julio. La intención es negociar un aumento porcentual en el segundo semestre.
En medio de la negociación de la deuda externa, en la cual el Gobierno está enfocado de lleno, comienzan las negociaciones paritarias. En ese sentido el presidente Alberto Fernández consiguió el apoyo de los gremios más poderosos para establecer un parámetro consensuado para el primer semestre que evite desbordes en los reclamos y golpee las expectativas de los trabajadores.
Según trascendió en las próximas semanas se firmarán aumentos salariales bajo el esquema de sumas fijas trimestrales o cuatrimestrales de manera de patear hasta julio la definición de un incremento porcentual que en la Casa Rosada imaginan como producto de un acuerdo de precios y salarios y en el marco del futuro Consejo Económico Social.
Según consigna El Cronista, fuentes oficiales y de los gremios confirmaron que se resolverán los incrementos salariales del primer semestre en actividades como comercio, las industrias de construcción y metalúrgica, obras sanitarias, petroleros y encargados de edificio, además de estatales naciones y docentes, cuya recomposición podría sellarse la próximo semana, previo al inicio del ciclo lectivo.
¿Cómo quedarían entonces los aumentos de sueldo en el primer semestre?
- La paritaria bancaria acordó una suma fija de entre $ 4500 y $ 10.500 hasta marzo (que podría renovarse), mientras que fuentes oficiales anticiparon que aspiran a replicar el mismo modelo en las discusiones en marcha en la industria aceitera.
- En Comercio se menciona una suma de $ 4000 que se pagaría en dos tramos de $ 2000. Se fijaría para el período abril-julio ya que Comercio tiene vigente hasta fines de marzo la paritaria de 2019.
- La paritaria docente se sellaría con una suma fija de $ 2000 de marzo a junio.
«Cada gremio está evaluando (la suma fija), es muy probable. Se conversó con el Gobierno, pero aún no está todo cerrado. El gran tema es el monto de la suma», afirmó un referente de la CGT. En ese sentido, consideró que si en el Ejecutivo están proyectando que la inflación en el primer semestre del año se ubicará en torno al 16%, la suma no puede estar por debajo.
«Hay que ver, no puede ser menos de 15% o 20% siempre que se garantice la recuperación del salario», advirtió otro dirigente, que ya negocia la posible adopción de ese esquema de recomposición salarial.