El diario La Nación y el amigo Juan Pablo de Santis publican hoy que comenzaron las citaciones a quienes compraron dólares el año pasado, cuando empezó el cepo cambiario, y no realizaron luego viajes.
Les dejo el artículo:
El Banco Central comenzó a enviar hace un mes intimaciones a personas que adquirieron dólares para hacer un viaje y de las que sospecha que finalmente no lo concretaron. Es decir, la entidad presume que pueden haber mentido en su declaración jurada para adquirir divisas.
A través de una carta, la Gerencia de Control del BCRA otorga a los sospechados un plazo de diez días para presentar documentación que pruebe el egreso del país o la devolución de las divisas en caso de suspensión el viaje. Por lo general, los inspectores piden fotocopias del pasaporte y tickets del medio de transporte utilizado, aunque la ley les permite requerir desde comprobantes de pago hasta peritajes contables.
El texto aclara que, en caso de no responder al requerimiento, se procederá a la suspensión para operar en el mercado único y libre de cambios, de acuerdo con el artículo 17 de la ley de régimen penal cambiario. La norma faculta a la aplicación de multas, sumarios administrativos e incluso a la judicialización de la investigación.
Una fuente de la autoridad monetaria explicó a LA NACION que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) confecciona nóminas de personas «sospechosas» a partir de cruzar información con las bases de datos de la Dirección Nacional de Migraciones. Los nombres son entregados a las áreas de control del Central, encargadas de fiscalizar operaciones financieras y cambiarias.
Desde el inicio de este procedimiento «se enviaron centenares de cartas», confirmó la fuente, sin precisar el número total de misivas. Estos procedimientos se realizan con base en el punto 3.2 de la comunicación «A» 5318 del Central.
El 5 de julio de 2012, el BCRA cambió las normas de formación de activos externos de residentes (incluso se prohibió la compra de dólares para ahorro). Los residentes y familiares a cargo son autorizados para acceder al mercado cambiario para realizar viajes «en función de los lugares de destino y días de estadía», aunque no se especifica cuál es el criterio.
La circular establece que, en caso de no realizar el viaje, el cliente asume el compromiso de devolver los dólares al mercado (canjeándolos por pesos al tipo de cambio oficial) dentro de los cinco días hábiles siguientes a la fecha declarada. Asimismo, las postergaciones por más de diez días hábiles también son consideradas por las autoridades como suspensiones.
Vale recordar que el formulario de validación de datos para adquirir divisas para viajes y turismo fue habilitado por la AFIP el 29 de mayo pasado.
SUSPENSIÓN DEL CUIT
El administrador federal de ingresos públicos, Ricardo Echegaray, dio el puntapié en la implementación de controles. A fines de enero pasado declaró que quienes compren divisas para viajar y no lo hagan podrían incluso llegar a sufrir la suspensión del CUIT.
El titular de la AFIP precisó que a partir de los controles que realizan, al sospechoso primero se lo inhabilita en el sistema, luego se informa al Banco Central, después se suspende la clave fiscal y, por último, podría haber una inspección fiscal al contribuyente en cuestión.
Según los cómputos del organismo recaudador, el 20% de las solicitudes aprobadas de compra de dólar para turismo termina presentando inconsistencias.
Echegaray informó en enero pasado que desde el debut del sistema había 13.943 casos de personas que compraron divisas, pero no realizaron el viaje ni devolvieron los billetes requeridos.
El año pasado, unos 11,25 millones de residentes viajaron a otros países, pero la AFIP emitió autorizaciones para 331.875 operaciones para comprar moneda extranjera para ese fin, lo cual hace presumir una alta tasa de argentinos que recurre al mercado informal o directamente echó mano a sus ahorros.
Los últimos registros daban cuenta de la presentación de unas 28.000 solicitudes mensuales para este ítem. El 63% correspondió a turismo y el 25%, a gestiones comerciales. Los principales destinos informados en las declaraciones juradas son Estados Unidos, con 23%; Brasil, 14%; Chile, 12%, y Uruguay, 11 por ciento.
Para los casos de supuesto fraude, la mitad de los declarantes afirmó que viajaría a Uruguay o a Chile como principal destino.
La AFIP dio cuenta de que tres de cada cuatro de los que demandan dólares para viajar son personas de entre 21 y 60 años: el 76% trabaja en relación de dependencia, de los cuales más de la mitad tienen ingresos que no superan los 8000 pesos mensuales.