Según el relevamiento que realiza mensualmente la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica (CAMIMA), la actividad metalúrgica cayó -16,5% en junio respecto del mismo mes de 2023 y acumuló una baja cercana al -11% en el primer semestre de este año.
Si bien los números van en línea con otros sondeos y preocupan al sector, el presidente de CAMIMA, Alberto Gesell, destacó que «la actividad bajó, pero no se detuvo».
De acuerdo con el relevamiento, el sector de Autopartes, cayó -16% interanual en junio; Máquinas y Bienes de Capital, lo hizo un -15%; Fundición y afines, un -21%; Maquinaria agrícola, un – 8%, y Exportaciones Metalúrgicas, un -3%.
«La foto de hoy muestra que los índices son preocupantes y que la actividad se redujo, pero nos tenemos que preguntar por qué llegamos a esto», puntualizó Gesell.
En ese contexto, si bien reconoció que «lo que se arrastra del año pasado es muy difícil de volver a acomodar», destacó que «las reformas profundas que se están proyectando van en sentido correcto».
«Necesitamos cambios en el sistema impositivo y una reforma laboral profunda, que impulse a la industria nacional y le permita competir en mejores condiciones con el mundo», explicó el titular de CAMIMA.
Como entidad, pidió también «acelerar la conformación del Consejo de Mayo para avanzar con los diez puntos del Pacto de Mayo, que incluye la reforma laboral que permitirá dejar a la industria argentina en una mejor posición frente al mundo».