Cuando no tenés toda la plata para afrontar un gasto, no queda otra opción que financiar. En caso contrario, muchas veces que tenemos el dinero pensamos que es mejor abonar el 100% del bien que queremos comprar para sacarnos de encima el gasto. Pero no siempre conviene pagar todo en cash, hoy en dia, hay varios instrumentos que rinden igual o mejor que la inflación:
- Plazos fijos UVA: plazos fijos que se ajustan por inflación. Rinden toda la inflación que haya habido los 6 o 12 meses que estuvo el dinero depositado.
- Lebacs: letras del Banco Central que emite todos los martes. A 35 días, rinden casi un 26%; y la inflación hacia adelante está calculada un 20% o 22%.
Por ejemplo, si tenés $10.000 y querés comprar un electrodoméstico que tiene financiación a 12 coutas sin interés, podés poner el dinero en un plazo fijo UVA, que no tiene intereses ni comisiones. Si la inflación es del 10%, te va a terminar rindiendo $1000 a 6 meses. Si lo dejas todo el año, a fin del proceso vas a haber ganado $2000.
En otro caso, si tenés un dinero más importante que te entró por «x» motivo, por ejemplo, $100.000, y querés pagar un viaje al exterior. Supongamos que pagas en 12 cuotas los pasajes, y la plata que tenías para pagar el viaje lo pones en Lebacs. Todos los meses (cada 35 dias), cuando se vence el plazo, sacas la plata de la cuota y la abonás. Y el resto del saldo lo volves a poner en Lebacs. A fin de cuentas, le vas a terminar ganando entre un 25% y 27% al dinero que tenías programado para pagar el viaje.