contador de visitas gratis Dinero electrónico: el mecanismo de pago que creció y busca consolidarse en 2021 - VilMetal.com.ar

Dinero electrónico: el mecanismo de pago que creció y busca consolidarse en 2021

Dinero electrónico: el mecanismo de pago que creció y busca consolidarse en 2021
El uso de la tarjeta de débito, el home banking, el mobile home banking y el link celular son una parte sustancial de la vida económica en el país. Según UDE Link, la cantidad de usuarios y las transacciones mantuvieron incrementos.

La utilización de dinero electrónico en cualquiera de sus variantes es una realidad en la Argentina. El uso de la tarjeta de débito, el home banking, el mobile home banking, el link celular, las operaciones por cajero automático y hasta las transferencias inmediatas entre cuentas propias y a terceros son una parte sustancial de la vida económica en el país. Y la pandemia no hizo más que acentuar esa tendencia.

Tras el récord de 37,7 millones de usuarios alcanzado en septiembre, esa cifra se atenuó a 36,2 millones en el penúltimo mes del año, al tiempo que la cantidad de transacciones se desaceleró desde un pico de 570 millones desde el inicio de la cuarentena preventiva a 485 millones. Sin embargo, la actividad se mantiene en altos niveles históricos.

Según el informe mensual UDE Link, que mide la evolución del uso de dinero electrónico en la Argentina en base a datos de 30 millones de clientes, tanto la cantidad de usuarios como de transacciones mantuvieron incrementos de 16,6% y 16,8%, respectivamente en comparación con noviembre de 2019. Y el índice de uso de dinero electrónico en valores reales aumentó 18,2%, muy por debajo de la suba del 45,6% que acumuló el total de dinero transaccional.

La consolidación del uso de dinero electrónico se explica en parte por la caída de la velocidad de circulación del dinero producto del ASPO y luego del DISPO como consecuencia de la pandemia.

De octubre a noviembre, señala el informe, la banca digital acusó una caída en parte por estacionalidad, ya que en igual mes de 2019 los cuatro canales también reflejaron menos actividad. Aun así, los niveles transaccionales siguieron muy por arriba de los del año anterior: 29% en Home Banking; 36% en Mobile Home Banking y 19% en Link Celular.

Del mismo modo, si bien disminuyó la cantidad de usuarios de los canales electrónicos en noviembre, la tendencia de recurrir a esas formas transaccionales parecen consolidadas. Incluso se observó un leve aumento del uso de los cajeros automáticos, pese a la disminución de la circulación de las personas.

En el acumulado de los primeros 11 meses de 2020 en comparación con similar tramo de 2019 se observaron aumentos de los usuarios en todos los canales, con un total general que se expandió 11,8%. En el desglose, creció 6 % el uso de cajeros, home banking 22%, mobile banking 31,9%; link celular 33,9% y la billetera electrónica (VALEpei) 404,8 por ciento.

Ese comportamiento se manifestó también en la cantidad de transacciones monetarias por cliente. Si bien descendió 3% en el mes a poco más de 93 millones, mantuvo un crecimiento de 43,7% desde el inicio de la cuarentena y 50,8% en un año; y en todos los casos acumuló notorios avances, con la excepción de mobile pos que acusó un leve retroceso.

Resulta destacable el crecimiento de la Billetera Digital Valepei, que permite el envío y solicitud de dinero al instante en forma gratuita desde cualquier cuenta del sistema financiero hacia personas con la app o con CBU, Alias CBU y a no bancarizados.

El informe puntualiza que los usuarios de Home Banking bajaron 3,9% en el mes, pero mantuvieron un crecimiento notable de 29,1% en el año y 22% en el promedio de los 11 meses a noviembre. Se hicieron más de 206 millones de transacciones, con un promedio de casi 73 por usuario.

Un fenómeno similar experimentó la cantidad de las operaciones en el resto de los canales: mobile home banking creció 35,6 en un año; Link Celular 30,2%; y los de la billetera digital se afirmaron en torno al máximo de la serie, con 197 mil; se multiplicó por 10 respecto del promedio histórico hasta el momento previo a la crisis sanitaria.