En medio de la guerra contra la inflación impulsada por el Gobierno nacional, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió este jueves que la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de abril fue del 6% y en lo que va del año acumula 23,1%. Sobre el tema habló Cecilia Boufflet en Lanata Sin Filtro por radio Mitre
Por Cecilia Boufflet
En el gobierno todas las voces hablaban de un 5,8 o 5,9% de inflación, pero fue un 6% y de una u otra manera es durísimo porque básicamente en los últimos meses si anualizas la inflación, está corriendo arriba de un 100%. Analizando el primer cuatrimestre, donde sacas el pico post guerra, ya está anualizada en el 85%. Las consultoras y los analistas ya hablan de un cierre anual, de base, fijado en un 70%.
¿Va a desacelerar la inflación?
Salvo que haya una devaluación o una cuestión externa muy fuerte, deberíamos empezar a ver un número cada vez más bajo de inflación, aun a pesar de que entre la suba de tarifas y demás. Con los precios en un momento va a empezar a jugar la recesión. Todas las paritarias que CFK festejaba con el número de ayer ya se sabe que pierden contra la inflación. La bancaria por ejemplo que fue la que hizo más ruido, tiene 60% y termina en octubre y en los últimos 12 meses hubo un 58% de inflación. Hoy un empleado bancario pierde contra la inflación.
Aunque todos los meses baje la inflación se va a mantener siempre entre una franja del 4 y 5 % y eso claramente es un problema porque indica que subimos un escalón respecto a la inflación.
En el conurbano la inflación de alimentos es peor todavía (62,5%). Martín Guzmán le dijo al gabinete económico que no hay que aplicar aun un plan antiinflacionario, lo que hay que hacer es terminar de implementar el acuerdo con el FMI, ver en que nivel está la inflación ahí y a partir de ese momento aplicar una política antiinflacionaria. Pero el peligro es que todo corre de atrás a la inflación, como la paritaria, que va a necesitar abrirse cada 3 meses en lugar de cada 6, el BCRA no logra acumular reservas y tiene que ir subiendo la tasa de interés. Hoy está en 49% y esto comienza a ponerle nafta a la discusión política.
Vimos en esta semana la difusión de una especie de reunión de un team económico armado por Sergio Massa. El kirchnerismo pone como condición correr a Guzmán para reunirse con Alberto Fernández, mientras que el presidente lo protege.
En la reunión de la que participaron Redrado, Rapetti, Bosio, Peirano entre otros, todos coincidieron que va a ser un año malo, donde la inflación será alta y la economía va a desacelerar con una recesión al final del 2022. Finalmente los presentes más allá del interés político propio sostuvieron que no hay manera de implementar un plan económico si no hay una solución en el conflicto político que hay en el gobierno.