Este jueves los bonos de la deuda argentina sufrieron caídas generalizadas en la bolsa y el Riesgo País llegó a los 1590 puntos una zona que no tocaba desde marzo. Esto se da en medio de las dudas sobre la política monetaria de Luis Caputo, entre la transferencias de letras al tesoro y las complicaciones para aumentar las reservas en dólares.
Las caídas de los títulos en moneda dura eran encabezadas por el Global 2046 (-4,1%); el Bonar 2038 (-1,4%) y el Bonar 2030 (-1,5%). Así, el riesgo país medido por el JP Morgan sube 1,1% a 1.595 puntos básicos, el mayor nivel desde inicios de junio.
En este marco, el S&P Merval retrocede 2,2%, luego de caer 3,28% el miércoles. Las acciones bajan hasta 5,7% encabezadas por Sociedad Comercial del Plata, Central Puerto (-5%), Supervielle (-4,6%) y Ternium (-4,1%). Las únicas dos subas pertenecen a Cablevisión Holding (0,8%) y Banco de Valores (0,5%).
Por su parte, los papeles argentinos que cotizan en Wall Street pierden hasta 3,2% liderados por Banco Supervielle, Loma Negra (-3,1%) y BBVA (3%). Se destaca Globant S.A (1,3%) y Ternium (0,3%). En lo que va del mes el riesgo país subió 9,6%, para rozar los 1.600 puntos, una zona que no tocaba desde marzo.
Esta situación financiera se da en medio del compromiso tomado por el ejecutivo de cortar con las canillas de emisión y transferir las Letras Fiscales al Tesoro. Además, Luis Caputo se encuentra en búsqueda de financiamiento externo por las negativas del FMI para un nuevo giro. Cabe destacar que esta tarde el titular del Palacio de Hacienda se reunió con Georgieva, directora del FMI en Brasil y la norteamericana calificó el encuentro como productivo.
El indicador de JP Morgan que mide el sobre costo de la deuda argentina sube 18 puntos en esta rueda, empujado por la caída de los bonos en dólares, que pierden en torno al 1%.
En julio, la cotización del AL30, el título en dólares con más liquidez, se hundió 15% después de haber llegado a subir 60% a lo largo del año.
El cambio de tendencia se vincula con las dificultades de Argentina para acumular divisas y fortalecer las reservas.
Desde el cambio de Gobierno, el Central compró US$ 17.640 millones, pero solo pudo retener un tercio de esas divisas, porque debió usar el resto para pagar deudas y asistir la demanda del mercado.
Las reservas están en US$ 27.528 millones, apenas US$ 6.500 millones por encima del cierre de la gestión de Alberto Fernández.