Según una nota publicada por Pablo Wende en Ambito Financiero, mucha aerolíneas están aumentando el precio de los pasajes en dólares, de manera que cada vez será más dificil aprovechar la brecha entre el dólar oficial y el dólar blue.
Esto es lo que se publicó en el diario:
La aerolínea israelí El Al cobrará desde hoy un recargo por los tickets aéreos emitidos desde la Argentina. Según comunicó la compañía a las agencias de viajes, el «recargo de combustible» para pasajes sacados en el país será de u$s 590 para pasajes en clase económica y de u$s 830 para los comprados en clase ejecutiva.Este recargo sería sólo una anécdota (no son tan numerosos los argentinos que sacan pasajes por El Al), de no ser porque este tipo de medidas es el que está adoptando la mayor parte de las líneas aéreas que operan en el país. Como consecuencia, los agentes de viajes aseguran que el aumento de costos ha sido tan notable en los últimos 60 días que los precios de los pasajes en pesos para viajar al exterior prácticamente ya equiparan al dólar paralelo. De esta forma, la ventaja de contar con una brecha superior al 60% entre el tipo de cambio oficial y el «blue» prácticamente desapareció para la compra de pasajes.
Al sacar un pasaje al exterior, las agencias cobran un recargo del 20% sobre el tipo de cambio oficial, según dispuso el Gobierno hace ya dos meses. Según dispuso la AFIP, se trata de un adelanto de impuestos (Ganancias o Bienes Personales) que el contribuyente podrá reclamar el año siguiente al momento de presentar la declaración jurada.
Pero si bien se la presentó como una medida de «administración tributaria», en la práctica se buscó desalentar los viajes al exterior, ya que se trata de una de las principales vías de salida de divisas.
Pero, tal como informó este diario la semana pasada, las líneas aéreas decidieron aumentos significativos de los precios de los pasajes en dólares. El objetivo es que para el cliente argentino el costo medido en moneda dura sea el mismo que el que pagan los clientes en todo el mundo y no que se produzcan diferencias significativas a favor del pasajero argentino. Prácticamente todas las compañías aéreas agrupadas en IATA habían ya avanzado en esa dirección, encareciendo notoriamente los precios para los pasajes sacados desde la Argentina, sin importar la combinación de vuelos que se estuviera buscando. Y esto se hizo mucho más habitual todavía para vuelos que no tocan la Argentina.
El Gobierno también está haciendo lo suyo para limitar la salida de dólares por turismo. Por ejemplo, cortó la posibilidad de que un extranjero compre pasajes desde la Argentina, aunque no lo anunció. Sucede que el proceso de adquisición de pasajes se volvió tan burocrático para los no residentes, que no les queda otra alternativa que optar por sacar el pasaje en su país de residencia. Los casos más notorios eran los de los uruguayos, que aprovechaban para sacar tickets desde Buenos Aires mucho más baratos que los que podían obtener en Montevideo. Ahora, sin embargo, esta ventaja es cada vez más finita y está cerca de desaparecer.
Las agencias de viajes también cortaron maniobras cada vez más organizadas, por las cuales los clientes sacaban pasajes de ida y vuelta desde otros países, pero tocando Buenos Aires. La operatoria también permitía una importante «bicicleta», que era aprovechada sobre todo por gente que tiene familiares o amigos en el exterior. «Dejá que el pasaje te lo compro con tarjeta emitida en la Argentina», era una de las sugerencias habituales, cada vez que alguien recibía alguna visita en el país.