El informe corresponde a la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, que también precisó que el mes pasado la misma familia requirió de $104.966 para integrar la clase media y $35.700 para no caer en situación de indigencia.
Una familia de cuatro miembros que vive en la Ciudad de Buenos Aires debió contar en agosto con $67.780 para no ser considerada pobre, un 1,85% más que en julio.
El informe corresponde a la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, que también precisó que el mes pasado la misma familia requirió de $104.966 para integrar la clase media y $35.700 para no caer en situación de indigencia.
Para cualquiera de los tres casos, debe tenerse en cuenta que el cálculo del organismo estadístico porteño no incluye en los gastos al alquiler de la vivienda, que elevaría en diferentes proporciones los recursos necesarios para revistar en cada uno de los estratos sociales.
Como viene ocurriendo en los últimos meses, a raíz de una desaceleración de los aumentos en los precios de los alimentos, las canastas de indigencia y pobreza subieron en agosto menos que la de clase media, un proceso inverso al que se observa en la medición interanual.
Así, el mes pasado el 1,85% de aumento de la Canasta Básica Total (CBT) que determina los límites de la pobreza, superó el 1,02% de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marca el tope de la indigencia, pero a su vez estuvo debajo del 2,47% de incremento de la Canasta Total (CT) que en diferentes proporciones delimita a la clase media y a los sectores medio frágil y acomodados.
En los tres casos, el incremento fue menor a la inflación esperada para el mes a escala nacional que esta tarde dará a conocer el INDEC.
El organismo nacional dará a conocer los valores de pobreza e indigencia el próximo jueves 16 de septiembre. Pero en la medición de los últimos doce meses, el aumento fue mayor para los sectores indigentes (52%) que para los pobres (47,56%) y los de clase media (47,07%).
En este caso, el mayor aumento para el estrato de indigencia se debió a que los alimentos en particular (especialmente la carne) y los bienes en general tuvieron incrementos superiores a los servicios. La Dirección General de Estadística y Censos tiene en cuenta a seis estratos sociales en su clasificación.
En agosto, una familia compuesta por una pareja de 35 años, «ambos económicamente activos y propietarios de la vivienda», con dos hijos varones de 9 y 6 años, requirió de estos ingresos para estar ubicado en cada uno de los estratos:
En situación de indigencia: hasta $35.700,08.
En situación de pobreza no indigente: entre $35.700,09 y $67.780,28.
No pobres vulnerables: de $67,780,29 a $83.973,09.
Sector medio frágil: entre $83.973,10 y $104.966,37.
Sector medio «clase media»: entre $104.966,38 y $335.892,39.
Sectores acomodados: $335.892,40 o más.
Fuente: NA