El equipo técnico del organismo internacional reveló el acuerdo entre ambas partes tras considerar que se cumplieron con la mayoría de las metas trazadas en el programa hasta junio de este año. Se le desembolsará al país US$3.900 millones.
Desde el equipo técnico del Fondo Monetario Internacional, encabezado por Luis Cubeddu, Subdirector del Departamento del Hemisferio Occidental y Jefe de Misión para Argentina, emitieron un comunicado en el que se dio a conocer esta decisión que, una vez sea aprobada formalmente, derivará en un ingreso de US$3.900 millones para el país. También se refirieron al contexto macroeconómico nacional.
Teniendo en cuenta este futuro desembolso que se acordó tras considerar que gran parte de las metas proyectadas hasta el pasado mes de junio se alcanzaron (a excepción de las reservas internacionales netas), Argentina previamente deberá acudir a sus reservas para pagar el vencimiento que tiene lugar esta semana por más de US$2.600 millones.
«El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas han llegado a un acuerdo, a nivel de personal técnico, sobre la segunda revisión bajo el acuerdo de Facilidades Extendidas de 30 meses de Argentina», revela el texto.
El mismo continúa argumentando que «las recientes y decisivas medidas de política destinadas a corregir reveses anteriores, están ayudando a restaurar la confianza y fortalecer la estabilidad macroeconómica, incluso mediante la reconstrucción de las reservas internacionales».
«La implementación decidida de políticas sigue siendo esencial para consolidar la estabilidad macroeconómica y comenzar a abordar los desafíos arraigados de Argentina, en particular la inflación alta y persistente», puntualizó.
Por el lado de los objetivos más determinantes fijados una vez concretado el acuerdo, relacionados con el déficit fiscal y las reservas internacionales netas, se mantendrán sin modificaciones hasta el año próximo. En cuanto a este último ítem, la cifra del aumento de estas durante 2022 y 2023 alcanzaría los US$9.800 millones según estimaciones del FMI.
Si bien en el comunicado se enuncia que siguen habiendo fuerte presiones inflacionarias, consideraron que la suba de precios mermará durante este año y el siguiente a raíz de «una combinación de marcos de políticas económicas más estrictas, incertidumbres reducidos debido a la implementación sostenida del programa y la evolución proyectada de los precios mundiales de las materias primas».
Siguiendo por la línea de lo macroeconómico, el texto expresa que «en el contexto de acciones decididas por parte del nuevo equipo económico, las presiones del mercado se están disipando y la perspectiva de crecimiento permanece sin cambios en 4% para este año, antes de moderarse a la tasa potencial de 2% a partir de 2023».
«El Banco Central está comprometido con la implementación continua y más consistente del marco de política monetaria, que ya está generando tasas de interés reales positivas. Esto es necesario para fortalecer la demanda de activos en pesos, reducir las presiones externas y apoyar una reducción de la inflación alta y persistente, respaldada también por una reducción continua en el financiamiento monetario del déficit fiscal», explicó.
Luego sostuvo: «Los incentivos bien diseñados para alentar la inversión y el potencial de exportación de los sectores estratégicos, especialmente la energía, siguen siendo cruciales».